Teleférico de Caracas, sentir el silencio

Impresionante paisaje

Frio de 12 grados centígrdos en el monte

Desde una altura venezolana

Por: Roberto F. Campos

Elevarse en una cabina de teleférico siempre trae aparejado la sensación del verdadero silencio, como volar en un planeador y experimentar sensaciones de miedo y sorpresa.
Por tanto, tomar esa experiencia en el de Caracas, trae unas cuantas de estas ideas, teniendo en cuenta que te lleva a la altura del Pico Ávila desde donde por una parte puedes ver el mar y del otro lado la
capital venezolana, a dos mil 140 metros sobre el nivel del mar.
Con el nombre aportado por los primeros pobladores del lugar, los Caribes, el Warairarepano es un sistema teleférico de la ciudad inaugurado el 29 de septiembre de 1955 y puesto en servicio el 19 de abril de 1956 por el entonces presidente, general Marcos Pérez Jiménez.

Un hotel bien alto

Los guías lo explican como uno de los más seguros y modernos del mundo. Con 83 cabinas, cada una para ocho personas, y un recorrido de 3,5 kilómetros en 18 minutos. Arriba, puede el visitante encontrar 12 grados centígrados de temperatura, y mucha variedad.

Carro de otras épocas

Esa sierra los indígenas la nombraban grande o lugar de dantas, un animal parecido al elefante pero más pequeño del que se alimentaban.

Mostradores donde pedir variedades de dulces y otros alimentos están en una zona para caminar, con jardines de hortensias, las flores preferidas de la esposa de Pérez Jiménez, también una pista de hielo y varios restaurantes.

En una parte del paseo aparece una gran asta con 40 metros, 36 hacia arriba y cuatro de profundidad, con una enorme bandera venezolana, cuyo original se encuentra a la entrada del Paseo de los Próceres, abajo, en la capital.

Y en lo más alto el Hotel Humboldt de 1956 con 14 pisos, cinco habitaciones (todas suite) en cada uno hasta completar 70, y un piso superior desde el que aparece una panorámica de 360 grados de Caracas.

El edificio, luego de diversos usos en distintas épocas, está ahora en reparaciones, aunque los visitantes pueden recorrer sus plantas más inmediatas y refrescar en bares como el Salón Alemán.

El Parque Nacional El Ávila cuenta con una superficie de 851,92 kilómetros cuadrados, ubicado en la cadena del litoral dentro de la cordillera de la costa, centro-norte de Venezuela, y va desde Caracas hasta el estado de Miranda.

Se nombraba Guaira Repano o Warairarepano (Sierra Grande) y en 1778 le bautizan como Ávila debido al dueño de esos terrenos Juan Antonio Ávila.

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