CURIOSIDADES
¿Voy
a vivir 300 años?
Por
Roberto F. Campos
La
Habana.- Pese al agobio que puede caracterizar al hombre moderno, hoy muchos
apuntan a la búsqueda de una longevidad con calidad de vida, ancianidad lúcida
y activa, que corone cualquier biografía.
En
una oportunidad, el doctor Eugenio Selman (Matanzas, Cuba, 1930-2015), fundador
del club de los 120 años en Cuba, confesó a este periodista que el ser humano
podría vivir 300 años.
Selman no fue un iluso o un autor de ciencia
ficción, sino un relevante médico nombrado doctor Honoris Causa en Ciencias
Biológicas de la Universidad de Oriente y Profesor de Mérito del Instituto Superior
de Ciencias Médicas Especialista de 2do Grado de Cirugía.
Aunque sus opiniones pueden sorprender a
muchos, y hasta generar burlas, se trata más bien de una filosofía, alegoría o
estrategia del especialista para poner en la mira de las personas sus potencialidades
más saludables.
Al margen de cualquier interpretación de
esas palabras, en su Club aparecen muchas personas veteranas que, mediante su
forma de vida, atestiguan la posibilidad del ser humano de llegar a más altas
cotas.
Algunos informes mundiales certifican esas
posibilidades humanas como ejemplifica la estadounidense Dina Manfredini, quien
vivió 115 años.
La lista no es corta; en materia masculina
el récord de vida en estos momentos lo lleva el japonés de 115 años Jiroemon
Kumura, aún lejos de la marca de la francesa Jeanne Calment (1875-1997), quien
vivió 122 años y 164 días.
Entonces, ¿Cuánto podrá vivir el ser
humano?, ¿qué calidad puede presentar el terrícola en una etapa tan avanzada de
su decursar?
UN
HUMANO MAS VIEJO Y MAS ACTIVO
Elementos como la obesidad, el tabaco, el
alcohol, las drogas y desfavorables hábitos de vida, falta de movimiento y
ejercicios, tanto para la mente como el cuerpo, condimentan los problemas que
disminuyen las posibilidades de longevidad satisfactoria.
La mayoría de los expertos coinciden en que
la tecnología y los descubrimientos puedan aportar vías para prolongar la
existencia.
Algunos informes médicos señalan que los
humanos pueden llegar a un máximo de 120 años, aunque los países más ricos
establecen un promedio que en unos casos sobrepasa los 70 años y en otros los
80, con diferencias a favor de las mujeres.
Un accidente o estilo de vida
auto-destructivo puede acabar de repente con un ser humano, independientemente
de sus genes.
Desde los años 50 del siglo pasado, el mundo
industrializado cambió las expectativas de vida, al alargarlas hasta los 83
años de edad que promedian las mujeres japonesas actuales.
Ese aumento las niponas lo logran con
métodos tradicionales tomando en cuenta tres elementos básicos: alimentación,
higiene y medicina.
Sin embargo, en 2001 se comprobó que las
tres cuartas partes de las personas con más de 60 años vivían en los países en
vías de desarrollo, una evidente contradicción.
Envejecemos
como parte de un proceso natural, esa selección nos debilita desde el mismo
inicio de nuestras vidas.
En España, residen unas 10 mil personas con
más de 100 años de edad sobre una población de 45 millones de habitantes, o
sea, ni el 0,025 por ciento del total, una muestra de que los humanos aún no
están capacitados para esa longevidad.
Los científicos están divididos; unos opinan
que el envejecimiento lo producen la muerte de células, un hecho irreversible,
mientras otros propugnan sobre el predominio de los genes, controlables.
El biólogo estadounidense Leonard Hayflick
no considera el envejecimiento una enfermedad, estima que curado el cáncer y
los padecimientos cardiovasculares, el hombre ganaría 15 años de vida. Tal
situación no depende de los genes, sino de la degeneración celular, los órganos
y los procesos metabólicos.
Por su parte, el jefe de la División de
Enfermedades Renales e Hipertensión de la Universidad de Colorado, Estados
Unidos, doctor Richard Jonson, descubrió que al modificar los genes de un
gusano en laboratorio, este puede vivir menos tiempo; todo depende por tanto de
ajustes genéticos.
Unos por un camino y otros, por otro,
concluyen que el ser humano podría tener 120 años como esperanza de vida, si
hay una modificación de genes o una manera de proteger las células para que
sean efectivas por un tiempo mayor.
Un estudio de la Universidad de Chicago de
hace una década predijo los 85 años como media de esperanza de vida. Con datos
de Japón, Estados Unidos y Francia se reafirma estar muy lejos del siglo como
esperanza de vida.
Mediante cálculos científicos de 0 a 99
años, la mortalidad disminuyó 1,5 por ciento anual en Francia; 1,2, en Japón, y
solo 0,4 en Estados Unidos, por lo que después de 2040 para Francia y Japón se
puede superar los 85 años de esperanza de vida como promedio y para 2100m, en
Estados Unidos.
Pero hay detalles de la ciencia que pueden
aportar esperanza, como es el caso de la nanotecnología, que permita en breve
repuestos corporales duraderos.
Se trata de pequeños sensores,
microordenadores, aparatos tan minúsculos que puedan implantarse y ser
factibles a control para cuidar la salud, con tratamientos automáticos, para
sustituir los engorrosos chequeos médicos.
En
la actualidad comienza la creación de repuestos corporales, como una cadera de
aleación de metal con durabilidad de 100 años, que permita aguantar 100
millones de pasos, los que alguien de 50 caminaría hasta cumplir los 100.
Algunos científicos señalan la
responsabilidad de la enzima telomerasa, capaz de evitar que los telómeros
pierdan tamaño, especie de fuente de juventud para las células.
Estudiosos del Albert Einstein Collage of
Medicine de Nueva York notaron en la mayoría de quienes sobrepasan los 100 años
una mutación genética que les mantiene elevado el colesterol HDL (también llamado
colesterol bueno).
Para el doctor Aubrey De Grey, la primera
persona que vivirá 150 años ya nació y quien llegará a los mil años vendrá al
mundo en 20.
Aubrey David Nicholas Jasper de Grey, nacido
en 1963 en Londres, es un gerontólogo biomédico graduado en la Universidad de
Cambridge, conocido por obras como La teoría del envejecimiento de los
radicales libres mitocondriales.
Otros científicos consideran míticos los
criterios de Aubrey de Grey y cercanos a la Biblia, en la cual se habla de los
900 años que vivió Matusalén.
Ese médico británico fundó un instituto en
California que investiga la longevidad humana y cree que en vida logrará ver
las herramientas necesarias para la “cura” del envejecimiento, con desaparición
de enfermedades originadas con la vida y de esa manera extender la existencia
de manera indefinida.
Tal extensión, está al alcance de las
medusas turrotopsis nutrícula, dice. Para el científico, en los próximos 25
años estará listo el control médico de todos los padecimientos causados por
infecciones.
En su filosofía, el futuro posibilitará que
el ser humano visite al médico solo para mantenimiento, terapia genética, de
células madre y estimulación inmunológica.
Las estadísticas añaden que para 2030
existirá más de un millón de personas por encima de los 100 años, cuando en
Japón actualmente existen 44 mil con esa condición.
Vivir más con mejor salud, constituye una
apuesta de algunos científicos, quienes opinan que es factible vivir 300 años
en estado favorable de mente y cuerpo, para lo cual, añaden, se requiere de una
naturaleza saludable, mejor de la que conocemos. Ya otra cosa sería el deseo de
cada cual de permanecer mucho tiempo en el Planeta Tierra.
EJEMPLOS
DE LONGEVIDAD (RECUADRO)
EL
HOMBRE MÁS LONGEVO DE CUBA
En 2021 falleció Emilio Duanes Dubalcer, el
hombre más longevo de Cuba a la edad de 120 años, en el municipio Minas, de la
central provincia de Camagüey.
La
causa de muerte fue una neumonía repentina luego de estar encamado por un año
producto de una fractura de cadera, según informó el periodista Leonardo
González Lamas en su cuenta de Facebook.
Duanes Dubalcer nació el 10 de mayo de 1901
en Haití y, a la edad de nueve años, emigró hacia Venezuela en compañía de una
tía. Más tarde llegaron a este país caribeño, por la oriental provincia de
Santiago de Cuba, para establecerse en la demarcación de Holguín, cuando Emilio
tenía 12 años.
Tras varios destinos, arribó a Minas en el
año 1999, y tuvo 13 hijos, 36 nietos y más de 40 bisnietos.
EL
AJEDRECISTA RUSO MÁS LONGEVO DEL MUNDO
En mayo de 2022 el Gran Maestro del mundo
del ajedrez Yuri Averbach falleció a la edad de 100 años, informó el servicio
de prensa de la Federación Rusa de Ajedrez, sin que indicara la causa de su
muerte.
Nacido
el 8 de febrero de 1922 en la ciudad de Kaluga, Rusia, se le reconoció como el
ajedrecista de mayor edad a nivel internacional desde que el húngaro Andor
Lilienthal falleciera el 12 de Julio de 2010 a la edad de 99. Ingeniero de
profesión, Averbach recibió el título de Gran Maestro en 1952.
En 1954 se convirtió en campeón de la Unión
Soviética, y como miembro del equipo nacional ganó el Campeonato de Europa por
equipos (1957, 1965), además de que participó y ganó varios torneos
internacionales.
PANAMÁ
REGISTRA LA TERCERA PERSONA MÁS LONGEVA
En abril de 2023 el ciudadano José Jiménez,
de 116 años de edad, se convirtió en la
tercera persona más longeva en Panamá, indicó la Contraloría General de la
República en un comunicado.
Tras
concluir los censos de población y vivienda, iniciados en enero último, los
registros señalan a este anciano que reside en el Hogar San Juan de Dios, en la
occidental provincia de Veraguas, junto a otros 41 adultos mayores. El próximo
5 de junio Jiménez cumplirá 117 años de edad.
La persona más longeva de Panamá, también
encontrada en estos estudios es Mercedes Chami Dogirama, de 125 años, nacida el
13 de marzo de 1898 y es oriunda de la comarca originaria Emberá Wounaan, en el
corregimiento de Lajas Blancas, en la provincia de Darién.
También ubicaron a Leónidas Pinto de León,
con 117 años, el segundo ciudadano de mayor edad, quien reside en Nueva Italia,
oriental provincia de Colón.
/rfc