Pescar agujas en Cuba

Por Roberto F. Campos

. Una de las maneras más atractivas de pasar vacaciones activas está en participar en la pesca de la aguja, en particular en el torneo más viejo de su tipo en el orbe, el Hemingway de La Habana.

Cada año es más atractivo el torneo internacional de la pesca de la aguja Hemingway que hoy está en pleno apogeo con la reciente realización de su 59 edición, en aguas de la capital cubana.
Esa afirmación de los organizadores se corrobora con la presencia en esta oportunidad (1-6 de junio de 2009), de 120 pescadores en 19 equipos o embarcaciones, cifra mayor a la pasada competencia.
Entre los participantes están aficionados a la pesca de peces pelágicos de Francia, Estados Unidos, España, Holanda, República Checa, Costa Rica, Guadalupe, Islas Caimán, Canadá, Rusia, Inglaterra, Ecuador y Cuba.
El año anterior registró el torneo la presencia de 19 equipos con 104 pescadores, por lo que anotan un crecimiento de este encuentro, considerado el más antiguo de su tipo en el mundo, creado el 26 de mayo de 1950 en presencia del novelista estadounidense Ernest Hemingway.
Recuerdan que el propio escritor donó el trofeo principal, una Copa de Plata, y propuso que recibiría ese galardón el primer equipo ganador tres veces, aunque no fueran consecutivas.
Fue entonces que los asistentes propusieron otorgarle el nombre del escritor a la lid, sostenido hasta el presente. En 1961 y 1962 no se celebraron y en 1963 reanudan las competencias con carácter nacional hasta 1977. Un año después vuelve a tener carácter internacional.
Como nota curiosa, en 1960 compite Fidel Castro, acompañado del comandante Ernesto Che Guevara, y obtiene el premio de máximo acumulador de puntos, única ocasión en que se reunieron el líder de la Revolución Cubana y Hemingway, quien participó con su esposa Mery.
Este es el torneo más antiguo, solo antecedido por la Copa Mundial del Atún en Nueva Escocia y el Torneo del Sábalo en México, pero de la aguja es el más añejo, refleja el Comodoro del Club Hemingway, José Miguel Díaz Escrich, principal animador de la actualidad en estos certámenes.
Entre los premios que otorga el Hemingway actual están los tres primeros lugares, la primera captura y el mayor dorado, siempre por equipos compuestos de cuatro personas, sumados un capitán y marinero.
Los participantes buscan capturar peces del tipo Blue Marlin, White Marlin, Sailfish y Spearfish, bajo el concepto de Tag and Releas (atrapar y soltar) para proteger las especies, y con las reglas de la International Billfishing Foundation.
El torneo Hemingway constituye uno de los principales eventos deportivos y recreativos del país y lleva el apoyo del Ministerio del Turismo (MINTUR) de Cuba, cuando entre sus estrategias aparece la diversificación de las ofertas. Esta nación recibe por año más de dos millones de visitantes.


Hemingway y la buena pesca en Cuba

El 59 Torneo Internacional de la Pesca de la Aguja Hemingway trae a colación las excelentes condiciones turísticas de este país y curiosidades geográficas.
En el orbe no hay fenómeno natural que tenga tanta íntima relación con un personaje de las letras como la Corriente del Golfo, ubicada entre Estados Unidos y Cuba, inseparable del Premio Nobel de Literatura Ernest Hemingway.
Desde que en 1928 el autor de "Adiós a las Armas" llegó por primera vez a La Habana en el vapor Orita, el mar y su corriente marinera comenzaron a impresionar en la mirada y los sentimientos del en ese entonces joven reportero.
Ya para 1932, navegó hacia la Isla junto a Joe Russell, su amigo traficante de alcohol en épocas de ley seca en los Estados Unidos, y comprendió que en Cuba se podía estar.
Ello lo reafirmó en 1939, cuando definitivamente compró Finca Vigía, en las alturas de Santa María del Rosario (San Francisco de Paula), periferia capitalina, donde desde 1940 permanecería más de 20 años, unido muy sentimentalmente al país y a su gente.
Para él, "Es difícil explicar la fresca brisa matinal que sopla incluso en los días más calurosos de estío sobre las colinas que rodean a La Habana" (Crónica “El Gran Río Azul”, en Holiday, julio de 1949).
Pero por sobre todo diría: "... la principal razón de vivir en Cuba es el ´Gran Río Azul´, de tres cuartos a una milla de profundidad y de sesenta a ochenta millas de ancho".
Esa corriente le inspiró la literatura y su afición, casi profesión, por pescar, por perseguir a los peces pelágicos y entablar con ellos una lucha decisiva y filosófica, hasta el punto de llegar a escribir "El Viejo y el Mar" una noveleta (¿novela corta o cuento largo?) que influyó notablemente para que le entregaran en 1954 el Premio Nobel.
La Corriente del Golfo es una vía marítima muy peculiar que cruza el Estrecho de La Florida hasta adquirir un ancho de 80 kilómetros y tener una profundidad variable de unos 600 a mil metros.
Tal fue el empleo por el escritor de ese lugar, su examen y difusión en sus textos que la región céntrica de esa corriente llegó a denominarse "La Milla Hemingway", donde mejores capturas de peces de pico se realizan.

Un club cubano y la pesca de la aguja

Unido a la competencia más antigua en el mundo de la pesca de la aguja está hoy con mucha fuerza un club cubano de gran tradición y reconocido en todo el orbe, el Hemingway.
Cuando en Cuba la náutica recreativa comenzó a tomar auge a la sombra del turismo como industria, apareció, el 21 de mayo de 1992 el Club Náutico Internacional Hemingway.
Esa inauguración –en la marina del mismo nombre-, constituyó un anticipo de la concepción del turismo como industria, que el gobierno abrazó propiamente a partir de 1994 y 1995, ahora con una espiral creciente de poco más de dos millones de viajeros por año.
El antecedente más exacto de esta institución, lo constituye la creación en 1950 del Club Náutico Internacional de La Habana, instalado en la Avenida del Puerto, donde hoy existe un bar, que aflora a las aguas de esa rada.
Esa inicial organización, la fundó el Comodoro Rafael Pozo, quien a su vez dirigía el Havana Yacht Club, uno de los más elitistas de ese entonces, acompañado precisamente por el novelista estadounidense Ernest Hemingway, quien viviera en la capital cubana por 22 años y amaba al mar y a los pescadores de este país.
Ese era el Club que organizaba los torneos de pesca de la aguja, que luego de varios vaivenes, se mantuvo hasta la actualidad, cuando incluso la International Game Fish Association (IGFA) lo incluyó en la red de los torneos mundiales más importantes como clasificatorio.
El propio Comodoro de ese Club Hemingway, José Miguel Díaz Escrich, reconoce que anualmente rondan las aguas cubanas y tocan en puertos turísticos unas cuatro mil embarcaciones de recreo, de ahí la relevancia de la posición de su entidad.
Ahora se nombra Club Náutico Internacional Hemingway de Cuba, debido a que su alcance, iniciado en La Habana, se expandió y recibió la misión de potenciar la recreación marinera de punta a cabo en este país.
Están afiliados más de mil socios de 44 países, sobre todo, diplomáticos, directivos, ejecutivos y comerciantes que pueden residir en Cuba o viajar con frecuencia a la Isla y, de esta manera tienen facilidades de atraque, realización de pesquerías y encuentros.

Ganadores del Torneo:
1.- lugar. Embarcación Marlin X de Francia con mil puntos y tres capturas. Gana por tercera vez el campeonato; también logra la primera captura en la competencia.
2.- lugar. Embarcación Wet Dream de Estados Unidos
3.- lugar. Embarcación Havana de España
.- El Team 18 de Inglaterra logró el Mayor Dorado
.- Primera captura: Equipo 1 Marlin X de Francia, Francois Gerard Aprile
.- Equipos rusos presentes: Marlin XIV, Marlin XVIII y Blue Sky.
Participaron en el certamen: 120 pescadores en 19 equipos, de: Francia, Estados Unidos, España, Holanda, República Checa, Costa Rica, Guadalupe, Islas Caimán, Canadá, Rusia, Inglaterra, Ecuador y Cuba.
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