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El Festival
del Habano desde la mirada de un periodista cubano
Por Masiel
Fernández Bolaños
NOTA. Una colega decidió publicar una entrevista con este periodista, que adjuntamos en el blog.
La Habana, 1 mar.2018. Roberto F. Campos, periodista de la Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina, comparte hoy la satisfacción de haber cubierto las 20 ediciones del Festival del Habano, un evento que cada año convoca a los amantes de ese producto tan cubano.
Nominado Hombre Habano del Año en el 2000 en la esfera de la Comunicación, Campos cuenta sobre su experiencia como reportero de esta agencia y, por supuesto, como periodista del país.
Seguir de cerca el Festival del Habano significó para mí ver la evolución de este producto en el mercado de artículos de lujo, y el desarrollo de los profesionales del sector como es el caso de los sommeliers vinculados con catas y evaluación de los puros cubanos Premium, subraya.
A su juicio, este Festival representa el vínculo de la industria con las tradiciones y cultura cubanas y un nivel organizativo superior en cuanto a los viajes de incentivos y el turismo de reuniones y congresos.
Campos destaca que esta cita cada año toma más vuelo y caracteriza el interés de los expertos y aficionados a los habanos de todo el mundo, teniendo en cuenta que la corporación Habanos S.A. distribuye este tipo de puro a más de 150 países.
Los habanos son los mejores del mundo, los Premium o hechos a mano, por la triple condición de suelo, clima y experiencia de los productores, tanto de la fase agraria como la industrial. Se trata de un producto con una larga historia y muy vinculado a los hechos más trascendentales de este país, enfatiza.
En particular los medios de prensa cubanos prácticamente reportaron de manera informativa estas reuniones, pues en un inicio nadie las conocía. Propiamente el movimiento de los festivales del habano comenzó en 1994 con una cena de lujo en el restaurante Las Ruinas, del parque Lenin de La Habana, relata.
Un año después, añade, se entregaron los galardones Hombre Habano del Año que luego se nombraron Premio Habano del Año. En 1999 se transformó esta reunión en Festival del Habano como tal.
El trabajo de los periodistas cubanos desempeña uno de los papeles más importantes en este asunto, por constituir reflejo hacia el resto de los colegas, sobre todo los de los mercados más importantes de habanos en el mundo, opina.
Alrededor de dos mil personas de 70 países participan hasta el 2 de marzo en la XX edición del Festival.
/mfb
La Habana, 1 mar.2018. Roberto F. Campos, periodista de la Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina, comparte hoy la satisfacción de haber cubierto las 20 ediciones del Festival del Habano, un evento que cada año convoca a los amantes de ese producto tan cubano.
Nominado Hombre Habano del Año en el 2000 en la esfera de la Comunicación, Campos cuenta sobre su experiencia como reportero de esta agencia y, por supuesto, como periodista del país.
Seguir de cerca el Festival del Habano significó para mí ver la evolución de este producto en el mercado de artículos de lujo, y el desarrollo de los profesionales del sector como es el caso de los sommeliers vinculados con catas y evaluación de los puros cubanos Premium, subraya.
A su juicio, este Festival representa el vínculo de la industria con las tradiciones y cultura cubanas y un nivel organizativo superior en cuanto a los viajes de incentivos y el turismo de reuniones y congresos.
Campos destaca que esta cita cada año toma más vuelo y caracteriza el interés de los expertos y aficionados a los habanos de todo el mundo, teniendo en cuenta que la corporación Habanos S.A. distribuye este tipo de puro a más de 150 países.
Los habanos son los mejores del mundo, los Premium o hechos a mano, por la triple condición de suelo, clima y experiencia de los productores, tanto de la fase agraria como la industrial. Se trata de un producto con una larga historia y muy vinculado a los hechos más trascendentales de este país, enfatiza.
En particular los medios de prensa cubanos prácticamente reportaron de manera informativa estas reuniones, pues en un inicio nadie las conocía. Propiamente el movimiento de los festivales del habano comenzó en 1994 con una cena de lujo en el restaurante Las Ruinas, del parque Lenin de La Habana, relata.
Un año después, añade, se entregaron los galardones Hombre Habano del Año que luego se nombraron Premio Habano del Año. En 1999 se transformó esta reunión en Festival del Habano como tal.
El trabajo de los periodistas cubanos desempeña uno de los papeles más importantes en este asunto, por constituir reflejo hacia el resto de los colegas, sobre todo los de los mercados más importantes de habanos en el mundo, opina.
Alrededor de dos mil personas de 70 países participan hasta el 2 de marzo en la XX edición del Festival.
/mfb
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