Por Roberto F. Campos
La Habana, 23 Feb. 2010. El reconocido músico brasileño Ivan Lins reconoció hoy su gusto por Cuba, su gente, y sentenció que La Habana es la ciudad más bella del mundo.
Lins participa como invitado de honor en el XII Festival del Habano (22-26 de febrero) en el que toman parte más de mil personas de 70 naciones interesadas en el tabaco Premium más reclamado en el orbe.
Luego de un magistral concierto de apertura del encuentro, en el Gran Teatro de La Habana, junto al pianista cubano Chucho Valdés y la cantante portuguesa Mariza, el carioca confesó a este periodista sus encantos por estar nuevamente en la Isla.
Dijo que hablar de Cuba representa para él una larga conversación en particular sobre La Habana donde tiene muchos amigos, sobre todo músicos, y considera que la mas cercada relación de su país con naciones de habla hispana esta aquí.
“Amo esta ciudad y estar en este Festival, como en cualquier otro festival que se celebre en este país, es un sueño. Estoy tan emocionado que mirando la ciudad lloré tres veces”, significó el artista.
Y reiteró que para él es la ciudad más bella del mundo. Mostró además su satisfacción por el concierto inaugural, poder hacer su música a la par de reconocer que ama los habanos, cuando fuma esporádicamente, sobre todo después de actuaciones.
“Estar en este Festival es juntar el placer de la música y el placer de fumar un purísimo de este país”, insistió.
Lins es pianista, compositor e intérprete y nació en Rio de Janeiro en 1945. Desde sus inicios recibió la influencia de varios géneros musicales como el Jazz, el Bossa Nova y el Soul y toma el piano desde los 18 años.
Su primer éxito musical fue la pieza Madalena, grabada por Elis Regina. Entre sus canciones más conocidas están Abre alas, Somos todos iguais, Nesta noite y Comenzar de novo, todas en sociedad con Víctor Martins, con quien fundó la compañía discográfica Velas.
A partir de los años 80 del pasado siglo elevó su carrera musical al reconocimiento internacional, principalmente en Estados Unidos donde sus piezas fueron interpretadas por músicos de la talla de George Benson o Ella Fitzgeral; en 2009 recibe un Grammy Latino.
rfc/
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